La jara (Cistus Ladanifer) es una planta con flores de la familia de las cistáceas. Este arbusto pegajoso crece hasta 2,5 metros y se puede encontrar en toda la región del Mediterráneo occidental. Es muy común en Portugal, especialmente en el sur (Alentejo y Algarve) donde las comunidades de jara cubren grandes áreas del campo. En particular, en el Algarve, hay una subespecie de Cistus ladanifer llamada sulcatus, que se puede encontrar muy cerca de la costa, siendo mucho más pequeña y con las hojas más cerca del suelo; las flores de Cistus Ladanifer Sulcatus generalmente no tienen puntos.

Aquí, en el suroeste portugués, el Eucalyptus (Eucalyptus Globulus), la Lavanda Silvestre (Lavandula Stoechas), Cistus Ladanifer y muchas otras plantas forman una flora que le da a nuestra región un aroma muy especial. Hay muchos nombres en Portugal para la planta Cistus Ladanifer, pero se conoce principalmente por su nombre común: Esteva. Las plantas Cistus Ladanifer se pueden adaptar a los suelos pobres y no necesitan mucha agua. El matorral maquis del oeste del Algarve se compone de muchas especies, entre las que se encuentran la jara. Las plantas de jara más viejas pueden crecer bastante altas y junto con otras plantas como el árbol de fresa (arbutus unedo) y el alcornoque (quercus suber). En conjunto proporcionan un paisaje protector que cubre muchas colinas.

En estos, los animales autóctonos pueden prosperar, como por ejemplo el jabalí, la mangosta egipcia, muchas aves e incluso poblaciones muy pequeñas del lince ibérico.

Hay muchos incendios forestales en Portugal y Cistus Ladanifer es una de las primeras especies en emerger después de los incendios. Las semillas de la planta están contenidas en una vaina redonda lignificada con varios compartimentos (generalmente entre 7 y 10). Estos compartimentos están probablemente detrás del origen de su nombre, como la palabra griega kístē significa: caja. Cistus Ladanifer es una angiosperma; esta palabra también es de origen griego y se usa para clasificar todas las plantas que producen semillas en una vaina. Cada vaina de jara puede contener entre aproximadamente 300 y 1000 semillas; en verano, estas vainas se abren y las semillas se dispersan, iniciando así una nueva generación de plantas de Cistus Ladanifer.

Cistus Ladanifer florece en primavera (entre mayo y junio) y quizás sea la mejor época para visitar el Algarve. En esa época del año, el paisaje rural está lleno de puntos blancos y es muy agradable. La jara se usa como planta ornamental (aunque predominantemente en países donde no es nativa) y su flor puede ser una de las razones de esto, ya que es una de las flores más hermosas que se encuentran.

Floreciendo solo por un corto tiempo, las flores de Cistus Ladanifer son muy delicadas. Son de un color blanco brillante y exhiben 5 puntos marrones / rojos, uno en cada uno de los pétalos. En el centro de la flor se encuentran el estambre y el pistilo, respectivamente, el órgano sexual masculino y femenino de la flor, que en el caso de Cistus Ladanifer son de color amarillo. Siendo un país con una larga tradición cristiana / católica, no es de extrañar que la cultura popular haya asociado los puntos de la flor de Cistus con las 5 heridas de Jesucristo. 

Por último, pero no por ello menos importante, unas pocas palabras sobre las hojas: son de color verde oscuro, lanceoladas (es decir, en forma de la cabeza de una lanza) y opuestas. Cistus Ladanifer tiene hojas durante todo el año; estas hojas producen una resina que es muy pegajosa. La resina de Cistus Ladanifer protege a la planta contra sus enemigos naturales y la planta produce más resina en el verano. Es esta resina, que también cubre muchas de las ramas superiores más pequeñas, lo que hace que el Cistus Ladanifer sea tan interesante para nosotros, los humanos. (Lea sobre la cosecha en el próximo artículo)